Aún vivimos en un mundo en el que la maldad impera en muchos lados del planeta, en la que podemos ver cómo criaturas muy nobles son blanco de maltratos y abusos físicos y psicológicos. Afortunadamente existen fundaciones y organizaciones que se encargan de restaurar la vida de los peluditos caninos sin voz padecen grandes penurias.
Ese es el caso de Ángel, una mezcla de galgo que fue encontrado y rescatado por una organización irlandesa llamada PAWS.
Cuando Ángel fue rescatado era muy temeroso y le costaba ver a los ojos a las personas, por lo que se pudo deducir que sufrió de mucho maltrato con sus antiguos dueños, porque llamarlos familia sería muy irresponsable.
Ángel fue tratado con mucho amor y paciencia e incluso recibió tratamiento por parte de psicólogos caninos, pues el trauma que había padecido este can era tan grande que sólo se sentaba con la cabeza agachada de frente a la pared por horas.
Era incapaz de voltear a mirar a alguien y ni siquiera tocaba la comida, solo lo hacía cuando se quedaba completamente solo, lo que demuestra el nivel de maltrato y abuso que recibió, bien sea en la calle o con dueños irresponsables.
De acuerdo con los psicólogos caninos, cuando un perro es rescatado en la calle es mayor la paciencia que debe tener la nueva familia, ya que no resultará fácil que el can vuelva a ganar la confianza en los humanos luego de haber pasado por episodios tan duros en su vida.
Luego de que Angel se recuperar física y emocionalmente en la fundación PAWS, una familia que había perdido a sus dos perritos decidió adoptarlo junto con otro can de su misma raza para darle una nueva oportunidad en la vida.
Seis meses después de que fue rescatado, Ángel no es ni la sombra de aquel perro maltratado que apenas podía ver a los ojos a las personas.
Este es un video en donde puedes apreciar con más detalle la transformación de este perrito:
Todo esto nos demuestra que el amor puro y sincero lo puede todo y que a pesar de que hay personas que deciden hacer sufrir a estos animalitos tan inocentes, siempre hay alguien que está dispuesto a rescatarlos y devolverles la alegría de vivir.
Publicidad