No es magia ni un remedio casual, porque lo que verás a continuación es fisioterapia simple y fácil que todos tenemos a nuestro alcance. Necesitas dos minutos, sólo 120 segundos para estirar tu columna y aliviar el dolor de espalda. Para conseguirlo sñolo vas a necesitar tres cosas: una alfombra o mat de yoga, una pelota de tenis y una correa.
Lo mejor de todo es que si acostumbras a tu cuerpo a beneficiarse de este simple ejercicio cada día, disfrutarás de una mejor higiene postural, de un bienestar físico que revertirá de forma directa en tu calidad de vida. Si padeces lumbalgia o si pasas muchas horas sentado, este estiramiento que tiene su origen en un postura muy concreta del yoga te permitirá prevenir desde sobrecargas hasta posibles lesiones. Te lo explicamos a continuación:
Tu cuerpo te habla, pero a menudo no lo escuchas
Estamos seguros de que, en más de una ocasión, habrás llegado a casa con la sensación de tener algo “clavado” en la espalda. Ladeas la cabeza, mueves los hombros y la molestia parece que desaparece un poco. Nos vamos a la cama y al día siguiente amanecemos descansados, todo va bien. Podemos evitar las sobrecargas un mes, dos meses o tres meses.
No obstante, en caso de que nuestro trabajo nos obligue a mantener una misma posición a lo largo de varias horas, tarde o temprano aparecerá la lumbalgia, el latigazo cervical o incluso las cefaleas tensionales crónicas.
Nuestro cuerpo habla, y lo hace cada día con los calambres, el cuello rígido, el dolor de cabeza, el hormigueo en las manos, ese calor en la parte baja de la espalda. Todo ello son síntomas de una columna vertebral a la que no estamos cuidando como merece.
Tampoco podemos olvidar un aspecto esencial: Nuestras emociones impactan de forma directa en nuestra columna vertebral. Factores como el estrés, la ansiedad, los nervios o las preocupaciones tensan todas esas áreas comprendidas entre la zona cervical, la dorsal, la lumbar, el sacro y el coxis.
Los estiramientos pueden ayudarte
Estirar tu columna durante solo dos minutos cada día te puede ayudar a sentirte mucho mejor. Puede parecerte algo demasiado sencillo, muy elemental como para ofrecernos tal bienestar. Sin embargo, la clave de todo ello está en estas dimensiones: Con una mala postura nuestras superficies articulares se ven menos irrigadas, hasta que, poco a poco, se van volviendo un poco más rígidas.
Algo tan adecuado como acostumbrarnos a realizar estiramientos cada día te ayudará a disminuir la tensión muscular y mejorar tu coordinación. Tampoco podemos olvidar que, para mejorar la salud de nuestros músculos y articulaciones, hemos de cuidar de un sentido que no todo el mundo sabe que tiene: la propiocepción.
La propiocepción nos ayuda desarrollar una adecuada conciencia corporal. Potenciamos esa capacidad natural que tiene nuestro cuerpo para detectar el movimiento y la posición de las articulaciones.
Aprende a estirar tu columna en solo 2 minutos
Para estirar tu columna vas a necesitar un espacio en tu casa donde poder tumbarte. Intenta que sea una superficie cómoda en la que tu espalda se mantenga rígida. Vamos a centrar nuestro sencillo ejercicio en el grupo muscular donde se concentran los isquiotibiales. Este es uno de los estiramientos más comunes en el ámbito deportivo y, por su facilidad y efectividad, nos va ser muy útil.
Implementos:
Una colchoneta o una alfombra donde estirarte
Una correa o una cinta
Una pelota de tenis
Procedimiento:
Ponte ropa cómoda. Acuéstate sobre la alfombra o la colchoneta, de forma que toda tu espalda se encuentre recta y en contacto con el suelo. Ahora coloca la pelota de tenis bajo tu región lumbar.
Es momento de tomar la correa o la cinta: debes colocarla en la planta del pie, no en el mismo centro, sino un poco más hacia los dedos.
Tomar la cinta con las manos y tensar la pierna durante unos veinte segundos o hasta donde te permita tu cuerpo.
Respirar profundamente, con lentitud.
A continuación, repetir el mismo ejercicio en la otra pierna.
Lo mejor es realizar este ejercicio de estiramientos a lo largo de dos minutos.
La pelota en tu zona lumbar te permitirá tomar conciencia de tu espalda mientras realizas los estiramientos; no obstante, si lo prefieres, puedes prescindir de ella. Es muy importante practicar este ejercicio cada día, ya que es un modo simple y espectacular de estirar la espalda para prevenir lesiones y sobrecargas. PERO recuerda no forzar el ejercicio y hacerlo de acuerdo a tus posibilidades, para así evitar lesiones.
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