Este perrito sabe muy bien que la esperanza es lo último que se pierde, por eso siempre supo que sus dueños volverían a buscarlo en el mismo lugar en donde se extravió.
Hace cuatro años Leo fue olvidado en la orilla de la ruta y desde ese momento, él se sienta en el lugar con la certeza de que vendrán a buscarlo. A la familia se le escapó del vehículo cuando pararon en el lugar a descansar pero nunca más lo volvieron a ver.
La señora Pinnuchawet ha alimentado a Leo durante todo este tiempo, incluso a intentado llevárselo a casa en varias ocaciones pero él siempre se ha rehusado.
El perro estaba muy delgado y con sarna, pero de todas maneras él prefería seguir en la orilla de la ruta esperando a sus dueños.
La mujer logró tenerlo por unos días en su hogar, sin embargo, se escapó y volvió a la ruta. Al ver que no se iría del ese lugar, la mujer comenzó a llevarle comida todos los días.
Un hombre de la zona publicó fotografías de Leo a través de sus redes sociales y una familia se contactó con él avisando que era igual al perro que habían extraviado hace unos años en el sector.
El perro se llamaba Bonbon y su dueño, Noi, explicó que no notaran que el perro se había extraviado hasta llegar a una estación de servicio. Lo buscaron por el sector y como no lo encontraron pensaron que estaba muerto, así que siguieron el camino sin él.
Los dueños viajaron al lugar para comprobar que se trataba de Bonbon y fue un momento muy emocionante. El perro se alegró mucho por verlos, pero cuando quisieron subirlo al auto, se negó.
Finalmente la señora Pinnuchawet lo llevó a su casa, ya que no quería irse con sus dueños.
La familia Noi prometió visitarlo cada cierto tiempo y encargarse de los tratamientos médicos contra el sarna.
Así esperaba Bonbon la llegada de sus dueños:
La paciencia siempre nos traerá recompensas, eso muy bien lo sabe Bonbon, quien esperó por 4 años el reencuentro.
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