El cachorro estaba atado a un árbol en medio de la nieve y ya no tenía fuerzas para nada. Dio fuertes alaridos que lograron llamar la atención de sus rescatadores.
Cuando vemos historias como estas, nos preguntamos cómo es posible qie el ser humano llegue a este punto. Un animal no debe ser botado a la calle o abandonado a su suerte. Este caso caló hondo en muchas personas al enterarse que un indefenso cachorro fue dejado en medio de la nieve con un frío que calaba los huesos.
Se trata de un perrito mezcla de pit bull que casi muere sino es que aparecen unos ángeles que se dieron cuenta a tiempo de su situación.
Donna, de Stray Rescue of St. Louis, fue quien lo vio por primera vez. Cuenta que su corazón se rompió en pedazos. “Este pobre perrito estaba temblando y gritando de miedo”, contó.
Si no es por sus fuertes y tristes aullidos de sufrimiento, nadie lo hubiera notado. Lo encontraron acurrucado contra un palo, intentando combatir el frío. También se dieron cuenta que tenía lesiones en todo su cuerpo. Sin duda, ha sufrido mucho en su corta vida.
Donna creyó que el cachorro huiría asustado si se le acercaban pero el pequeño no tenía fuerzas y no puso resistencia. Simplemente dejó que lo rescataran.
Fue llevado a un refugio y notaron que tenía una herida infectada a un costado. Además presentaba una fuerte desnutrición.
Afortunadamente la infección pudo ser tratada rápidamente con los cuidados y medicamentos necesarios. Weezer podría mejorar en poco tiempo.
Se calcula que tiene siete meses y tienen la esperanza que se recupere pronto para iniciar el proceso de adopción.
Todos esperan que encuentre a una familia que lo llene de amor y cuidados que siempre debió recibir.
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