¿Quién no ha pensado alguna vez en su vida dejar todo tirado e irse a un lugar lejano lejos de todo? Luego recapacitamos y decimos que mejor nos quedamos donde estamos y seguimos con nuestra vida como si nada.
Pues eso no fue lo que hizo Emma Orbach. La mujer proveniente de Gales si que lo pensó y lo hizo. Ella se dijo “quiero alejarme de la ciudad y vivir en la naturaleza“.
Pensaron que estaba loca pero para ella todo fluyó de lo más natural. Emma vive en una casa hecha de adobe y madera y se alimenta de lo que encuentra en el bosque. Además, tiene gallinas y cabras que llevó consigo a vivir lejos del mundanal ruido.
Su día a día transcurre lentamente y disfruta de lo que la rodea y ver las estrellas en la noche. Se preocupa de cuidar a sus animales y su pequeña huerta. Aprovecha todo el tiempo libre a tocar música y leer libros.
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