Siempre que pienso en el transporte público, un leve escalofrío recorre mi espalda. Y es que los buses y el metro están dentro del top 5 de lugares incómodos dentro de la ciudad, especialmente cuando debemos subirnos en horarios peak del día.
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Más de alguna vez me ha sucedido que quiero afirmarme de algún lado y, por más que busco, el mar de gente me impide alcanzar un poste libre así que confío en que la presión de la gente que va a pegada a mí me ayudará a no caer.
Pero esta joven debió haber estado tan harta de no poder afirmarse en el bus que se le ocurrió una ingeniosa solución que si bien no sirve para terminar con la falta de espacio, hará su viaje más ameno.
El registro muestra a la joven subiendo a un bus repleto con todos los pasamanos están ocupados. Y como no quiere caer el suelo o menos sobre otra persona, saca como si nada un destapador de cañerías de su bolso que acopla perfectamente al techo del transporte.
Realmente una idea increíble.
Quizás no se vea muy atractivo pero seguramente podría llevar uno y lo usaré para emergencias en la hora peak. Y en el baño del trabajo, si lo necesito alguna vez.
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