La eslovaca Ivanka Danisová tiene 30 años y nació con un extraño síndrome llamado Goldenhar, que causó que parte de los huesos de su cráneo no se desarrollaran normalmente. Por ello, el lado derecho de su rostro no encaja con el lado izquierdo y provocándole serios problema de salud.
A sus 30 años, y luego de cuatro cirugías tan riesgosas que podrían haber acabado con su vida, por fin puede masticar normalmente por primera vez.
La última de las cirugías duró 13 horas, y estuvo a cargo del especialista Russel Reid. El cirujano le prometió ayudarla a tener una vida normal reconstruyendo todo el lado derecho de su cara.
Sólo el año pasado, la mujer se sometió a dos cirugías continuas: una de 20 horas y otra de 11.
Danisová se vio enfrentada desde pequeña a los crueles comentarios de sus compañeros, que se burlaban de su aspecto.
Según le dijo al Daily Mail:
“Soy la persona más feliz del mundo porque la cirugía fue exitosa. Es algo indescriptible ya que es el sentimiento más hermoso del mundo y espero vivir como una persona saludable ahora”
“Este momento fue uno crucial en lo que será el resto de mi vida, no es y nunca será fácil para personas con estos problemas, pero para quien esté sufriendo, que sepas que no hay que perder la esperanza”.
Los cirujanos de la Universidad de Chicago que la operaron, debieron crear un hueso nuevo para acoplar su mandíbula al resto de su cráneo y recrear tejido de su cuerpo para darle una forma natural a su rostro.
Danisová es la primera persona europea en viajar a Estados Unidos para someterse a cirugías de este calibre, tan riesgosas para la vida de la persona.
La joven también ha debido someterse a quimioterapia para tratar la leucemia que la ha afectado, pero dice que es gracias a su hermana gemela y la ayuda de su familia que ha podido superar todas las contrariedades.
“Mucha gente me conoce y dice que soy una mensajera de buenas noticias y que los hago sonreír”, dice Danisová.
Si quieres ayudarla a costear sus procedimientos, puedes aportar en su página en GoFundMe.
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