Ingeborg Meinster-Van der Duin es profesora en una escuela en Harrem en los Países Bajos.
Ingeborg Meinster-Van der Duin profesora de la escuela Bavinck en Haarlem, Países Bajos ha dedicado gran parte de su vida a educar niños y por eso su vida cambió cuando por motivo de la pandemia cerraron la escuela donde trabaja.
Esta maestra vive por sus alumnos que día a día le alegran la vida en el aula. Al no aguantar tenerlos lejos decidió tejer muñequitos de cada uno para sentirlos cerca durante el encierro.
Los detalles en sus creaciones impresionan ya que cada muñeco lleva vestimentas distintivas y les puso pecas y anteojos a quien las tuviera. Ella tarde de 3 a 4 horas en confeccionar cada miniatura de sus alumnos.
Pero la colección no estaba completa sin su maestra, fue lo que pensaron sus alumnos, así que ella se puso manos a la obra y confeccionó un muñeco de ella misma.
Sus estudiantes pronto volverán a clases y su maestra piensa en darle a cada uno su muñeco.
Otros profesores le han pedido que haga muñecos de sus estudiantes pero Ingeborg dice que «no hay tiempo para eso» sino sólo para confeccionar con mucho cariño a los suyos.
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