Corría el año 2016 y el actor Jim Carrey era demandado por la madre de su ex novia, Cathriona White y por el esposo de ésta, Mark Burton, un reconocido cientólogo. De acuerdo a ellos, White habría fallecido debido a las drogas que Carrey le proveía además de haberla infectado con tres enfermedades de transmisión sexual distintas. El actor aseguró que todo esto era “un intento por explotar su fama creando falsos rumores”, indica el Daily Mail.
Los abogados de Carrey le aseguraron a The Hollywood Reporter que la demanda fue descartada el 25 de enero recién pasado y que “Jim está ansioso por poder continuar con su vida”.
Raymond Boucher, abogado de Carrey, dijo que White habría tomado los exámenes médicos de una amiga con enfermedades de transmisión sexual y habría puesto su propio nombre y cambiado las fechas en ellos para acusarlo.
La acusación resultó ser real cuando descubrieron mensajes de textos intercambiados entre las dos amigas, donde White le explicaba su plan.
Las pruebas fueron suficientes para el juez y Carrey finalmente quedó libre de cualquier demanda. Es difícil de creer, pero pensamos que podrían ser problemas mentales que la llevaron a actuar de tal forma.
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