El inesperado hecho ocurrió en Egipto.
Cuando hablamos de que pronto nacerá un bebé, nos imaginamos la forma tradicional: la madre en un hospital, acompañada de personal especializado, con anestesia y lo necesario para que nazca el bebé.
Sin embargo, últimamente ha resurgido la idea de un nacimiento más consciente. En casa, con parteras experimentadas y con estudios, en el silencio y comodidad del hogar. O hablamos también de los nacimientos en agua, donde la futura madre entra a una tina especialmente acondicionada para traer a su hijo de la forma más natural posible.
Pero este hecho dejó perplejos a los testigos que estuvieron presentes sin quererlo. Se trata del nacimiento de un bebé en el Mar Rojo.
Según contó en su Facebook Hadia Hosny El Said, ella se encontraba en el balcón del apartamento de un tío en Dahab, cuando notó a una familia que se disponía a disfrutar de un día de playa. Pero lo que vería a continuación la sorprendió.
De repente, vio a los dos hombres saliendo del mar con un recipiente en sus manos y algo más que le costó entender al principio. ¡Era un bebé que acaba de nacer!
Luego vio a la mujer saliendo también del mar luego de haber dado a luz hace unos minutos atrás. Al nacer el bebé, lo entregó a los hombres, puso la placenta en el recipiente y el resto es historia.
En la orilla esperaba otro niño, celebrando la nueva llegada de su hermanito. La familia se reunió en torno al pequeño y nuevo miembro que acababa de nacer.
No se sabe la identidad de la familia ni la condición del bebé pero, según vio, todos se mostraban muy felices y contentos.
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