Este joven siempre tuvo una clara determinación por salir de la pobreza, originario de Oaxaca y a punto de esfuerzo, hizo todo lo posible para poder estudiar. Desde niño se las ingenió para vender frutas y verduras para ayudar a su madre en casa y poder juntar el dinero necesario para entrar a una carrera que le permitiera cambiar su destino y lo logró.
Después de años intentándolo, en 2012, Ricardo Pedro Pablo, el esforzado joven de la región de la Cuenca, ubicada al norte de Oaxaca, ingresó al Instituto Tecnológico de Massachusetts en Estados Unidos y ya se graduó como doctor con especialidad en fisicoquímica.
No fue nada fácil, pues para obtener tal logro tuvo que luchar muy duro y dejó de lado su infancia para comenzar a trabajar y juntar dinero y luego cuando pudo entrar a estudiar en la facultad de química de la UNAM en Ciudad de México, supo que tenía que esforzarse más que todos los demás alumnos para ser destacado.
De esa forma, siendo un estudiante ejemplar, obtuvo una beca para viajar a Boston por parte de la Conacyt, convirtiéndose en el orgullo de su familia, pues su madre ni siquiera quiso enseñarle su idioma para que no fuera discriminado por los demás compañeros.
“Mi mamá me decía que la educación es algo que me podía sacar adelante, y entendí que hay una recompensa por echarle ganas” explica Ricardo, quien logró que su madre lo acompañara el día de su graduación, luciendo con orgullo un huipil de la región de la Cuenca.
Hoy, el joven piensa seguir triunfando en el extranjero con algunas investigaciones en el laboratorio del MIT para terminar algunos proyectos que tiene pendientes, y más adelante, planea hacer un postdoctorado para seguir aprendiendo.
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