Robin Williams sorprendió al mundo con su muerte pues nadie creí que alguien que se veía tan feliz y realizado pudiese terminar con su vida así.
La depresión a veces es invisible y es que nunca imaginamos que alguien que por fuera se ve feliz, pueda sentir tanto dolor y sufrir en silencio.
Robin Williams es un claro ejemplo de lo anterior. Siempre se le veía feliz, era exitoso y su carrera iba en ascenso.
Robin parecía muy feliz, siempre sonreía y su rostro denotaba tranquilidad, pero esa no era la verdad.
Su muerte alertó al mundo ya que son muchas las personas depresivas que demuestran lo contrario, por eso es importante de enterarnos de verdad de como se sienten los demás.
Zak, el hijo mayor de Robin, anunció la apertura de un centro de salud mental cuyo nombre es Inseparable para ayudar a quienes sufren de problemas como los que tenía su padre.
Zak contó a People que es parte de la directiva del centro y dice que alimentarse bien, ejercitarse y mantenerse lejos de los excesos lo ha ayudado a sobreponerse de perder a su padre.
Esperamos que este centro ayude a tantos que sufren en silencio de depresión y otros problemas.
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