Con este sencillo test podrás descubrir la forma en la que te enfrentas a los desafíos que cada día te pone la vida, incluso cuáles son tus mayores virtudes y cuáles tus peores defectos. Solo debes buscar tu estación y te sorprenderá el resultado. Si miras bien, en esta sopa de letras están escondidas las cuatro estaciones. Cada una de ellas representa un tipo de personalidad diferente y la primera que encuentres te definirá y será la que te describe fielmente.
Otoño
Si la primera palabra que viste fue OTOÑO es porque eres una persona creativa, sensible, muy emocional y empática. Enfrentas las cosas desde el corazón y los sentimientos y las personas te aprecian por tu honestidad y tu buen trato.
Las principales virtudes que tienes están relacionados con eso: con tu capacidad de relacionarte con los demás de una manera natural y genuina. Te desenvuelves como pez en el agua en las situaciones sociales y tienes pasta de líder; pero no un líder autoritario, sino un alguien que puede guiar desde la buena fe. La parte negativa es que tu empatía puede convertirse en tu peor debilidad. Te tomas los problemas de los demás como tuyos propios y siempre estás tratando de ayudar. Eso, aunque es algo bueno, puede llevar a que te dejes a ti mismo en último lugar. No te olvides: cuidarte no es ser egoísta.
Invierno
Si la primera palabra que descubriste fue INVIERNO, es porque eres una persona tranquila y pacífica. También un poco conservadora, porque no te gustan ni los grandes cambios ni las cosas que implican riesgos. Disfrutas de la familia, los amigos y las buenas costumbres.
La mayor de la virtudes que tienes es que tienes un sentido de la realidad muy práctico. Por eso no es difícil para ti resolver problemas, y, si tienes claro lo que los demás esperan de ti, no te cuesta cumplirlo y sobresalir. Eres trabajador, constante y nunca te faltan energías para hacer un poco más de lo que te piden.
El problema aparece cuando te ves obligado a cambiar el rumbo tradicional de las cosas, ya que podrías paralizarte y no saber a dónde ir. Si logras resolver el desafío, igualmente te sentirás incómodo al comienzo. Debes aprender a ser un poco más flexible.
Primavera
Si PRIMAVERA fue la primera palabra que distinguiste es porque eres una persona emprendedora, tenaz y segura de sí misma. Te conoces lo suficiente como para saber qué es lo que quieres, y no te quedas quieto hasta no dar con los medios para lograrlo.
Tu mayor virtud es tu perseverancia en buscar aquello que te hace feliz. Puede que por momentos parezca que has bajado los brazos: pero sólo estás preparándote para llegar más lejos en el próximo intento. Nunca te rindes ni abandonas tus sueños, pues para ti todo puede ser real si te lo propones. Tienes un buen equilibrio entre la imaginación y la realidad.
Lo malo es que a veces puedes ponerte demasiado exigente contigo mismo, lo que puede repercutir en tu estado de ánimo y hasta en tu salud. Aunque esa exigencia que te impones es la que te mueve, también te puede jugar en contra: hace más grande la frustración cuando las cosas no salen bien. No pierdas tus ganas de ir para adelante, pero trata de no ser tan duro contigo mismo: respira y vuelve a intentar.
Verano
Al haber encontrado la palabra VERANO en primera instancia demuestras que tienes una personalidad alegre y extrovertida; eres creativo y espontáneo. Puedes tomarte las cosas con humor y esa es una de tus mayores virtudes. La mayor parte del tiempo ves el vaso medio lleno, y logras levantarle el ánimo a todo el mundo. Sabes entender la vida como un sube y baja, y tienes una capacidad asombrosa para atravesar los momentos duros con fuerza y optimismo. Por eso, logras salir adelante hasta de las situaciones más difíciles.
Lo negativo de tu personalidad es que en ciertas ocasiones puedes ser inconstante y cuando las cosas requieren demasiada seriedad, te cuesta asumir el desafío. Podría ser que tengas problemas con el dinero y las finanzas, pues la organización no es lo tuyo. El principal desafío es encontrar tu propio equilibrio.
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