Mientras estaba embarazada, Sarah Jouanny notó como una de sus piernas comenzaba a hincharse. Podrían pensar que esto es algo normal durante ese periodo, sin embargo el asunto empeoró y la pierna izquierda dobló en peso y forma a la derecha.
La mujer de 32 años estaba horrorizada con lo que le estaba sucediendo. Su pierna no dejaba de crecer, hasta que por fin descubrió lo que le aquejaba.
Le diagnosticaron linfedema primario, una condición incurable que causa la hinchazón en los tejidos del cuerpo que puede desencadenarse por el embarazo. La condición crónica significa que el líquido linfático no puede circular adecuadamente alrededor de su pierna.
No cabía en su ropa y ya no podía lucir descubiertas sus piernas. Quizá para algunos es algo superficial, pero que afectaba muchísimo a esta maestra. Por lo que decidió hacer algo al respecto.
Gastó 24 mil dólares en tratamientos para reducir la hinchazón, a pesar de ser un padecimiento crónico, que incluye una liposucción y cirugía de transferencia de glanglios linfáticos vascularizados (VLNT), donde los ganglios linfáticos sanos se toman de la parte posterior y se insertan en la pierna con el objetivo de reducir la hinchazón.
“Tuve que vender nuestro automóvil para pagar la primera cirugía. Tenemos un seguro de salud, pero no cubrirán los costos de mis operaciones, ya que están clasificadas como cosméticas”
Sarah, que ha estado documentando su viaje en su blog, Lymphosaurus Rex, dijo que el procedimiento la ha hecho sentir menos restringida en el movimiento, pero que aún necesita considerar más cirugías en el futuro.
Después de 4 años de sufrimiento con su pierna hinchada, Sarah finalmente puede llevar una vida normal con su esposo, Bruce, de 39 años, su hija Charlie y su hijo Jagger. Y mantener a raya su condición. Porque si bien se redujo, tendrá que vivir con esto siempre.
De hecho usa una banda compresora para mantener a raya el problema.
Quizás sea una enfermedad crónica pero sin duda Sarah a sabido convivir con ella.
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