Cuando una integrante de la familia queda embarazada siempre es motivo de gozo. Sin embargo, al parecer, algunas personas piensan que cuando una mascota se preña, debe ser arrojada a la calle.
Sin ir más lejos, el que queden preñadas es el motivo por el que en general las personas no desean tener a hembras como mascotas, por el riesgo de que tengan crías, entren en celo, o no tener suficiente dinero para pagar por su esterilización.
Es el caso de esta gata siamesa que llegó a un refugio en Oregon luego de que la recogieran pensando que era una gata de la calle. De acuerdo a Cat Adoption Team, una organización sin fines de lucro, Hazel, como la nombraron, pues no tenía identificación debe haber vivido en una casa pues no era esquiva.
Hazel estaba preñada y dio a luz a 6 preciosos gatitos casi idénticos. “Todos eran blancos y no teníamos idea de que color serían” explicó Laura, quien adoptó a Hazel que se mantuvo pegada a sus crías desde el momento en que vieron la luz.
“Estamos agradecidos de que no haya tenido a sus bebés en la calle. En ese tiempo en Portland habías unos 37ºC”, dijo Laura.
No se tiene certeza del tiempo que Hazel pasó en la calle, pero es evidente lo feliz que está de tener un familia que la cuide nuevamente. Lo mejor de todo es que ahora tiene la oportunidad de jugar con sus hijos, a quienes les muestra como utilizar sus distintos juguetes y le enseña a lograr la mejor diversión entre todos.
“Incluso ahora que ya tienen 6 semanas, todavía la encuentro dándoles de beber leche y ella se deja”. En este minuto, Laura y su hija han cuidado a más de 170 gatitos durante los últimos 8 años y ahora buscarán un hogar permanente para cada uno de ellos.
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