Mientras conducía por un camino desolado en Texas, en un área conocida por mucho como un vertedero de perros, Judy Obregon se encontró con una triste situación. Parte de The Abandoned Ones, institución que rescata animales y quienes compartieron la historia, Judy conducía por un camino en un área conocida como vertedero de perros. Cuando salió del auto y se acercó, escuchó sus gemidos y su llanto, era tan solo un cachorro y lo habían abandonado.
El perro cojeando se sometió a su salvador colocando su cabeza en la mano de Judy. La correa improvisada del perro indicaba que originalmente estaba atado a un poste o cerca, pero de alguna forma había logrado liberarse.
Pero en vez de correr y alejarse del lugar, allí estaba sentada esperando que sus dueños volvieran por él, como haría cualquier perro leal.
Este fue el preciso momento en que lo encontró.
Judy metió a Callie en el automóvil y comenzó a alejarse. Pero todo lo que Callie quería hacer era agradecer a quien la había rescatado.
Así lo hizo, con muchos besos.
Llegaron al veterinario para un chequeo y Callie fue evaluada como un perro perfectamente sano, aparte de su leve cojera.
Luego el perrito fue acogido por la fundación, esperando su adopción. Dejó atrás su antigua vida y ahora está lleno de amor y felicidad, todo gracias a Judy.
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