La educación japonesa y en general la cultural de ese país es muy diferente a la de cualquier otra parte del mundo. Desde pequeños los niños tienen más responsabilidades en su escuela que solo estudiar y esta tradición lleva por nombre “O-soji”, la cual es impartida en todas las instituciones educacionales de Japón.
Todos los días se escoge a un cierto grupo de estudiantes para que cumpla diferentes tareas, como ir a buscar la comida a la cocina para servirle a sus compañeros o incluso limpiar los baños.
“En la escuela, un alumno no sólo estudia las materias, también aprende a cuidar lo que es público y a ser un ciudadano más consciente. Y nadie reclama, porque siempre ha sido así“.
Profesor Toshinori Saito, a BBC
Las escuelas japonesas no cuentan con comedores o cafeterías, ya que entre los mismos estudiantes se organizan y sirven todo dentro de la misma sala de clases. De hecho, este periodo de almuerzo se considera un tiempo educacional, al igual que cualquier otra materia.
Los profesores son los encargados de organizar turnos y después de almuerzo cada niño tiene una labor distinta: limpiar los baños, la sala de clases, trapear o barrer. También existe personal que se dedica a la limpieza y el aseo de la escuela, sin embargo, esta tradición de responsabilidades se imparte en las escuelas para que los niños aprendan desde pequeños a cuidar y respetar su entorno.
Interesting coincidence – listening to a story by @KatGregoryABC on @abcnews about Australia’s waste management crisis and saw these Japanese primary school students doing a cleanup outside their school. pic.twitter.com/i0LWXpy8HC
— Jake Sturmer (@JakeSturmer) April 26, 2018
Durante el Mundial de Fútbol de Brasil todos quedaron sorprendidos cuando vieron a los hinchas japoneses limpiar sus gradas, un gran reflejo de su educación fomentada desde primaria. Las calles del país también son reconocidas por su limpieza impecable.
Esta manera de educar a los niños podría ser vista como un abuso escolar en otros países, pero los japoneses lo consideran parte de su rutina e incluso lo disfrutan.
Probablemente si se educara así en todas partes, el mundo sería un lugar muy diferente.
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