Los fenómenos de internet y las redes sociales pueden volverse peligrosos cuando conllevan problemas a la salud. Por ejemplo, el juego de la Ballena Azul (que inducía a jóvenes y a adolescentes a dañarse y a cometer suicidio) fue un extremo ejemplo de este tipo de retos peligrosos.
Hoy nos encontramos con otra oleada de temeridad: el “Hot Water Challenge”, que ya ha cobrado varias víctimas mortales alrededor del mundo.
Hace ya algunos años se popularizó el “Ice Bucket Challenge”, que consistía en tirarse agua muy fría encima para crear conciencia y reunir fondos para la investigación de la enfermedad ELA. El Hot Water Challenge, como su nombre lo indica, es justo lo contrario: arrojarle agua hirviendo por encima a alguien.
Esto es obviamente mucho más peligroso, sin contar que no está asociado a ninguna causa benéfica. Además, produce quemaduras tan severas que en algunos casos las víctimas han perdido la vida.
En muchas ocasiones, estas graves quemaduras han sido autolesiones provocadas por las mismas personas muy jóvenes (e incluso menores de edad) que decidieron echarse el agua hirviendo encima ellos mismos.
Pero lo más peligroso de este juego es que se ha popularizado la costumbre de hacérselo a otra persona sin avisar, provocándole irreversibles secuelas e incluso la muerte.
El video a continuación muestra uno de estos casos. Las imágenes son fuertes y podrían herir tu sensibilidad:
#CongratulationsYouPlayedYourself: ANYONE who tries to do the #HotWaterChallenge! It’s NOT A Good Idea! pic.twitter.com/AkcqMWgwFt
— HOT 97 (@HOT97) 10 de agosto de 2017
Una niña de apenas 8 años es una de las víctimas mortales, ya que incluso se atrevió a beber agua hirviendo y murió a causa de graves quemaduras en la tráquea, según ha informado la revista Time.
Una niña de 11 años, llamada Jamoneisha Merritt, resultó gravemente herida luego de que sus amigos le echaran agua hirviendo en la cara mientras dormía y sufriera quemaduras de tercer grado en el 90% de su rostro y otras partes de su cuerpo.
Una de las últimas víctimas reportadas es un adolescente de 14 años llamado Nickolas Conrad, a quien sus amigos vertieron agua hirviendo mientras dormía.
Publicidad
