Esta casa de solo 2 metros y medio está ubicada en una calle de Londres y es bastante conocido porque parece una casa de muñecas, por su pequeño frontis.
Sin embargo con un poco de creatividad e ingenio todo lo normal y aburrido se puede convertir en lo mejor del mundo.
La casa tiene tres habitaciones, dos baños, una cocina, una sala y una oficina. Todo eso cabe al interior de esta casa.
Entre las casas vecinas había un pequeño pasaje estrecho que no se ocupó más y perdió su relevancia, por eso se decidió construir una casa en el espacio entre ellas.
Por años el lugar permaneció intacto porque nadie sabía cómo poder hacer una casa que cupiera en un lugar tan estrecho.
Afortunadamente los arquitectos lo lograron y la casa quedó fantásticamente hermosa.
Lo mejor de todo es que aprovecharon los espacios al máximo y lograron un lugar totalmente iluminado con luz natural durante el día. Lo que también produce la sensación de amplitud.
La casa llamó bastante la atención cuando la construyeron porque siempre deja con la boca abierta a quienes la conocen por dentro.
¿Has visto alguna casa así donde vives tu? Compártelo con tus amigos.
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