Los locatarios de Cupilco, un pueblo al sur de México, afirman que una de las estatuas de la Virgen María comenzó a llorar luego del gran terremoto que recientemente azotó a México dejando por lo menos 343 muertos. Luego de esto miles de personas católicas han ido al pueblo para verla y rezarle.
Según Lucia Torres Jimenez (68) “ella siente lo que siente México, siento lo que va a pasar”.
Según Metro el llanto de la estatua no es algo extraño, ya que lleva al menos 3 años con esas lágrimas en su rostro. Por su parte el Padre Enrico Lazzaroni le ha pedido a sus creyente que mantengan lo que ocurre en secreto.
Desde que ocurrió el terremoto este acontecimiento de la virgen se ha esparcido por todos lados e incluso los políticos consideran que es una muestra de apoyo.
Candelaria Perez Jimenez dijo que “sí creo que la Virgen ha hecho muchos milagros, yo no vine por curiosidad, sino que por mi fe, porque creo en Dios y nuestra Madre”.
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