Otitis es un hermoso gato blanco. Tiene una característica especial porque no tiene orejas y es sordo. La estudiante Molly Lichtenwalner lo vio ese día y sabía que él era el gato que necesitaba en su vida.
Los antiguos dueños de Otitis lo dejaron en el refugio luego que unos quistes lo dejaran sin sus orejas y perdiera la audición.
A Molly no le importó. Ella sufre de ansiedad y ya había tenido un perro sordo. Así que sabe cómo es vivir con mascotas con necesidades especiales. Otitis sería su nueva mascota y le daría el cariño que necesitaba.
Pero el gato también supo corresponderle. Según ella cuenta “yo sufro ansiedad severa por culpa de un accidente automovilístico. Por eso, siento que era hora de adoptar una mascota que me ayudara a lidiar con eso. Ahora tengo a un amigo al que abrazar mucho”.
Otitis resultó ser la mejor mascota de apoyo emocional que podría haber deseado. El gato se siente a gusto en su nuevo hogar y recibe mucho cariños de parte de su nueva dueña.
Además, Otitis parece saber cómo ayudarla cuando empieza a sentirse muy estresada o está a punto de sufrir un ataque de pánico. “A veces él es el único que consigue calmarme… El adoptarlo fue la mejor decisión que haya tomado. Yo creí estarlo salvando, pero era él quien me está salvando a mi. Vivir con él es fantástico. Es un gato amable y muy cariñoso; además, me hace sentir muy querida” .
Él es Otitis, no tiene orejas y fue dejado en un refugio después de perder la audición por culpa de unos quistes
Tiene 9 años y medio y está sordo
Molly Lichtenwalner es una chica que sufre de ansiedad y lo adoptó de un refugio
Ahora son inseparables y él la ayuda cuando sufre estrés y ataques de pánico
“Cuando estuviera lista adoptaría un gato con necesidades especiales”
Otitis está feliz de haber sido adoptado por ella…
“A veces él es el único que logra calmarme”
Es muy curioso y siempre está atento a lo que ella está haciendo
Otitis es su “animal de apoyo emocional”
“Adoptarlo es lo mejor que he hecho”
¡Qué buena dupla!
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