Ella y Bullock se conocieron en febrero de 2015, fecha en la cual mantuvieron relaciones sexuales mientras ella poseía una relación amorosa estable en paralelo. Además de los encuentros sexuales, ambos intercambiaron una serie de mensajes de textos que aluden a la ocurrencia de una relación fugaz, la cual se centraba en encuentros sexuales a escondidas.
Esta mujer realizó una denuncia en su contra, asegurando que Bullock la había violado y tras ser asediado socialmente por un año a raíz de esta acusación que lo se señalaban como autor de un acto atroz, se suicidó ahorcándose en el garaje de su casa en marzo de 2016. La identidad de la mujer ha sido reservada, pero informó a la policía de lo ocurrido desencadenando su detención y posterior arresto.
“Ross todavía estaría vivo si la acusación hubiese sido tratada con sensibilidad. La acusación cambió a Ross como persona. Lo hundió”
– Ronald Bullck, padre de Ross
La acusación en su contra no solo quedó en los archivos policiales del condado de West Mercia, en Inglaterra, sino que un sinfín de personas lo imputaron como culpable y lo asediaron socialmente en persona y en redes sociales. Bullock y su familia sabía que se trataba de acusaciones injuriosas, por lo que él no temía en exhibir una y otra vez las pruebas que probaban que los encuentros habían ocurrido bajo el consentimiento de ambos.
A pesar de las declaraciones y la exposición de mensajes de textos, Bullock, fue liberado bajo fianza y con la advertencia que en un año podría volver a ser detenido. Durante un año, el sujeto debió lidiar con la percepción negativa que todos se habían formado de él, impidiéndole llevar a acabo su vida de forma normal. En marzo de 2016 y casi a 12 meses de la presentación de las acusaciones, Bullck fue hallado ahorcado al interior del garaje de su hogar, en donde dejó además una nota relatando la catástrofe que vivió durante el último año y asegurando que la decisión era fue “liberarse del infierno”.
Muchos han especulado que las acusaciones provenientes de la mujer no identificada, encontrarían su origen en que en el momento en que ambos mantuvieron relaciones sexuales, ella mantenía una relación formal en paralelo. Presuntamente y con el propósito de liberarse de la culpa de la infidelidad, habría presentado acusaciones en contra de Bullock por violación.
La forma en que Bullock fue repudiado prácticamente de manera generalizada, conllevó que fuese catalogado como culpable, sin antes conocer la realidad de su versión. Las denuncias a través de redes sociales se transforman prácticamente en una sentencia contra el imputado, cuyo nombre resulta imposible de limpiar. Especialmente en tiempos en donde las vulneraciones en contra de las mujeres se han apoderado de la palestra a nivel mundial, entregándole una credibilidad prácticamente irrefutable al testimonio femenino.
Pese a la existencia del derecho inherente al ser humano a ser olvidado, en la práctica éste se vuelve casi imposible de ejercer gracias al internet. Una vez que alguien es acusado a través de redes sociales, el repudio colectivo solo tiende a aumentar, entregándole aún más credibilidad al relato, el cual al igual que muchas que vemos en internet pueden carecer de veracidad.
Debido a que internet, especialmente las redes sociales, no poseen limitación alguna, los usuarios pueden escribir y exteriorizar cualquier tipo de información, libres de seguir estándares previamente establecidos. De esta forma, cualquier tipo de denuncia o acusación en contra de una persona, se vuelve una verdadera sentencia de muerte, especialmente si se trata de algún delito de carácter sexual como del que fue acusado Bullock y el cual terminó acabando con su vida.
En conversación con Publimetro, el coordinador académico del Centro de Estudio de Derecho Informático de la Universidad de Chile, Alex Pesso, señala que a pesar de que la libertad de expresión sea uno de los elementos característicos de las redes sociales, ésta también se encuentra asociada a delitos perpetrados por los usuarios, tal como la calumnia y la injuria.
“Legalmente no es un requisito efectuar una denuncia para poder emitir una opinión o realizar una publicación en una red social, pero la libertad de expresión es una garantía que debe convivir con otros derechos garantizados con el de la honra y es ahí, en esa intersección, donde se pueden producir conflictos de relevancia jurídica”.
Muchas veces desestimamos el poder que recae sobre nosotros al escribir, comentar o exteriorizar algo en internet. Pese a que nos encontremos conscientes del poder que poseen actualmente las redes sociales, tendemos a olvidar el exuberante alcance que una publicación puede llegar a tener y especialmente el daño irreversible que podemos ocasionar con una frase, un video o una imagen. Elementos que se convierten de forma instantánea en pruebas fidedignas en contra del acusado, quien en la mayoría de las ocasiones no posee espacio alguno para defender su versión.
No todo lo que vemos o leemos en internet es real. De acuerdo al Centro de Control y Prevención de Enfermedades en Estados Unidos, los suicidios adolescentes aumentaron entre 2010 y 2015, luego de casi 20 años de tasas bajas. De acuerdo al estudio, los motivos estarían directamente relacionados con el uso de redes sociales, a raíz de la difusión instantánea que las caracteriza, cualquier tipo de dicho negativo o acusación en contra de alguien, se vuelve una sentencia de muerte e irrefutable.
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