Sin duda alguna, cuando pensamos en cuál es la enfermedad más terrible de esta época, la primera que nos viene a la mente es el cáncer. Esta triste y dura enfermedad cobra una gran cantidad de vidas al año; Sin embargo, afortunadamente, los avances en medicina disminuyen la mortalidad.
Usualmente y hasta hace unos meses, cuando alguien era diagnosticado con esta enfermedad, tenía tres opciones: tratamiento hormonal, radioterapia y quimioterapia. El inconveniente es que estos tratamientos son brutalmente agresivos para el organismo y no garantizan la cura del cáncer.
De esa forma, mientras reciben tratamiento, la mayoría de los pacientes sufren efectos secundarios extremadamente desagradables. Es un alto precio que hay que pagar por tener alguna posibilidad de librarse de esta terrible enfermedad. O, al menos, era el alto precio que pagar hasta este momento,
Afortunadamente, pareciera ser que la comunidad científica acaba de dar un paso tremendo a la hora de ganar la batalla contra el cáncer. Sin ir más lejos, esta es la historia de una mujer estadounidense de 49 años que se libró de un tumor muy complejo sin utilizar ninguno de los tres tratamientos convencionales.
Su nombre es Judy Perkins y tenía un cáncer de mama que se había extendido a varias zonas del cuerpo, entre ellas el hígado. Generalmente, los tumores de este tipo tienen un pronóstico muy malo y por eso, la mujer decidió someterse a un tratamiento experimental basado en la inmunoterapia.
Lo médicos sacaron algunas muestras de los tejidos cancerígenos de Perkins, posteriormente el equipo médico estudió sus células para ver qué mutaciones estaban provocando los daños en su cuerpo. Después, extrajeron también linfocitos, microorganismos que se encargan de la defensa de nuestro cuerpo ante amenazas.
Después de encontrar los linfocitos que podían combatir más eficazmente contra las células cancerígenas, el equipo comenzó a cultivarlas en el laboratorio. De esa forma, después de unos días Perkins recibió una inyección con 80 mil millones de glóbulos blancos en las zonas afectadas de su cuerpo. También, se le administró un medicamento que ayuda a fortalecer el sistema inmunológico.
Tras 42 semanas, los exámenes demostraron que la mujer estaba totalmente libre de cáncer y metástasis.
A pesar de que el tratamiento experimental solo ha sido probado en ella, la comunidad científica internacional planea comenzar a utilizarlo en más ocasiones hasta comprobar si su efectividad se puede repetir.
Actualmente, este tratamiento es uno más de las nuevas alternativas a la quimioterapia que se están desarrollando en los últimos años. Aunque el procedimiento estándar para curar el cáncer es muy efectivo, también provoca todo tipo de daños en el organismo y es muy invasivo. Por lo que algunos médicos consideran que debería utilizarse tan solo como último recurso.
La medicina moderna es una de las grandes maravillas de nuestro tiempo, pues hace sólo 50 años, una paciente como Perkins no habría podido sobrevivir a su enfermedad. Pero hoy en día, esta mujer norteamericana está en perfecto estado de salud, lista para continuar con su vida.
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