Los animales envejecen igual que un ser humano es un hecho, es por es que de la misma forma que muchos ancianos son abandonados, porque nadie quiere hacerse cargo de ellos, lo mismo pasa con los perros que llegan a una edad en la que ya no pueden depender de sí mismos.
En algo estamos todos de acuerdo (bueno, no todos, o no tendríamos esta nota, claro está): No hay nada más cruel que abandonar a un ser vivo cuando éste m{as necesita de la compañía de alguien y de su ayuda. Eso es precisamente lo que hizo este hombre en el Centro de Servicios de Animales en Los Angeles, California.
Llegó con su perra, Canela, al refugio y los dos compartían una historia de más de 18 años juntos, pero él ya había tomado la decisión de abandonarla.
“Ya no hace nada”, expresó el hombre a una de las trabajadoras, Laura Garrick, que estaba grabando el video. El hombre le decía a todos: “es una gran perra” y que la había adoptado de ese mismo refugio 15 años atrás.
Sin embargo, a ella no le bastó con ser una gran perra, pues 18 años después, Canela no tenía la misma energía que cuando era una cachorra. Y lo peor de todo es que si bien el hombre aseguraba que podía mantenerla, no le gustaba que ella sólo estuviese durmiendo todo el día, sin hacer nada.
La mujer que grabó el video comentó que Canela parecía muy asustada y que parecía intuir que algo no iba bien. Con su cola entre sus patas, la anciana perra sabía que su dueño estaba a punto de abandonarla sin pensar en todos los momentos que vivieron juntos. Un acto de crueldad animal por donde se le mire.
Laura publicó el video y escribió que Canela está ahora bajo el cuidado de Leave No Paws Behind, una organización que rescata perros mayores y animales con necesidades de salud especiales y les encuentra un hogar.
Tristemente, Canela pasará sus últimos días con quienes no la conocen, pero sí tienen un enorme corazón para recibirla y al menos los últimos meses de esta tierna perrita serán junto a una familia que la quiera y la cuide.
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