Cuando solo tenían 11 años, Emmy y Jake se conocieron y rápidamente se convirtieron en amigos, luego de dos años ya eran pareja. Lograron permanecer juntos hasta los 19 años, momento en el cual tuvieron que separarse ya que asistieron a universidades en países diferentes.
Pero la distancia no fue suficiente para romper esa relación sentimental, porque tras pasar cerca de 10 años manteniéndose en contacto, pero alejados, la pareja optó por dejar de negar sus emociones y embarcarse en una relación comprometida que transformaría sus vidas.
Para celebrar el reencuentro y el comienzo de una nueva etapa, planearon un viaje en el que Jake, sin decir nada, pensaba pedirle matrimonio a Emmy. Pero el destino les preparaba un obstáculo más, uno del que difícilmente saldrían bien librados.
Unos días antes del viaje, Emmy fue al doctor por un problema digestivo que le acompañaba desde hacía algún tiempo. Pero esa cita definió por completo su vida, ya que los inconvenientes de salud que experimentaba eran producto de un cáncer de tiroides que estaba en un estado tan avanzado que ya había comprometido varios de sus órganos. El pronóstico no era muy alentador.
Pero la pareja no se desanimó e impulsados por el optimismo y la buena actitud de Emmy, decidieron casarse lo más pronto posible, sabiendo que sería un matrimonio corto y que ella jamás podría ser madre, aunque era uno de sus mayores sueños.
Para cerrar su compromiso y celebrar su luna de miel, emprendieron un viaje en bicicleta desde Londres hasta Copenhague, un total de 2.000 kilómetros, en los que pretendían reunir fondos para la fundación de lucha contra el cáncer The Royal Marsden Cancer Charity.
Al regresar del viaje, la salud de Emmy se deterioró cada vez más, aunque su espíritu jamás se quebró y estuvo siempre agradecida con los momentos y personas con las que tuvo el placer de compartir. Es enero de este año ella falleció con apenas 31 años y antes de poder celebrar su primer aniversario de bodas.
Por eso, aquel día Jake le dedicó un sentido mensaje en donde recalcó su fuerza de voluntad y alegría infinita, además le agradeció una vez más por todas las enseñanzas, las palabras y el amor del que hoy se aferra para continuar.
No hacen falta años para que una historia de amor sea potente y contundente, porque a pesar de haber compartido juntos menos tiempo del que esperaban, el sentimiento entre ellos ha logrado trascender los límites.
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