Así como varios países del mundo, Brasil contabiliza miles muertos por coronavirus, pero a pesar de la situación, este país ha creado un plan para honrar la memoria de los fallecidos.
El proyecto se llama Bosques de la Memoria y tiene una intención ecológica con la cual esperan sembrar un árbol por cada muerte a causa de la pandemia.
Alrededor de 200.000 árboles serán sembrados por familiares de los fallecidos, así como lo hizo Paulo de Souza en un parque tropical en el interior de Río de Janeiro, luego de perder a su hermano, un piloto retirado.
“Le gustaba la naturaleza y le encantaba volar, esta es una hermosa forma de representarlo“.
La iniciativa es organizada por tres ONG que pretenden cumplir con la meta el próximo semestre, tanto para rendir el homenaje a los fallecidos como para contribuir al medio ambiente.
Luis Paulo Ferraz, uno de los coordinadores del proyecto señaló que “muchas de estas familias no tuvieron siquiera la oportunidad de enterrar a sus seres queridos”, en referencia a los protocolos para las víctimas del covid-19 donde no pueden tener contacto cercano con sus familiares.
“Mediante el gesto de plantar un árbol estos familiares están depositando mucho de su cariño y su añoranza en esa muda (de los árboles)“.
Luis Paulo Ferraz
José Oliveira Costa perdió a su hija Evandra, quien estaba por cumplir 44 años y murió el pasado noviembre por complicaciones asociadas al covid-19.
“En medio de tanta destrucción, el mundo necesita personas que tengan como propósito plantar mas árboles.
Un árbol para mí simboliza la eternidad. El nombre de mi hija está grabado aquí, sé que voy a volver y voy a ver este árbol crecer“.
José Oliveira Costa
El objetivo es alcanzar los 200.000 árboles con siembras en distintas regiones del país.
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