Ser padres cambia totalmente la vida y puede ser una de las tareas más difíciles que se puede llegar a enfrentar. Y Kari Lewis puede dar fe de ello.
Esta joven madre de Portland, EE.UU recientemente había adoptado a un bebé de 11 meses y sabía que la adapatación a su nueva familia y a su hogar, sería un poco más complejo.
Por eso Kari no pudo haber tomado la decisión más sabia de todas: también adoptó a un perro labrador australiano que, coincidentemente, tenía de 11 meses de edad.
Su nueva mascota se llamaría “Reagan” y se convirtió en el mejor amigo de su hijo Buddy. El perro le ayudó a que el proceso de adaptación fuera mucho más fácil. Y se llevaron muy bien desde el principio.
La madre de los pequeños va contando sus travesuras en su cuenta de Instagram y dice que los dos son verdaderos “hermanos”.
Y las imagenes son adorables. Nada mejor que la compañía de una mascota para hacer la vida un poco más llevadera. Y por eso, quisimos dejarte un video que muestra la relación de este niño con su mascota:
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