Generalmente solo nos preocupamos de juntar toda la ropa sucia, cargarla en la lavadora, agregar detergente y esperar a que la máquina haga todo el trabajo, pero esto tal vez sea una actitud bastante despreocupada y peligrosa para tus prendas, tu higiene y tu bolsillo.
Sigue los siguientes consejos para asegurarte de que tu ropa siempre quede limpia y protegida, dándoles más vida útil. Además ayudarás al medio ambiente, reduciendo el gasto excesivo de electricidad, agua y detergente.
1. Elimina las manchas inmediatamente
Creemos que la lavadora es una super máquina que puede borrar cualquier mancha que nuestra ropa tenga, pero eso no es cierto. Lo mejor es poner a remojar la prenda que has manchado y dejarla en el agua hasta que puedas lavarla en la lavadora.
2. Separa las prendas
Según los expertos se debe separar la ropa de color con la blanca, pero además entre los de color hay que hacer una separación entre colores vivos, claros y negros. También hay que deparar las prendas según los materiales y las telas, de acuerdo a la temperatura de lavado y secado. Así se pueden preservar los materiales y evitar la transferencia de bacterias entre textiles.
3. Primero coloca el jabón
Ante de poner la ropa dentro de la lavadora, debes poner el jabón, así te aseguras que de se disuelva en su totalidad, evitando los excesos. También es importante para que el detergente llegue a todas las prendas y no se quede en las que están más expuestas en la superficie.
4. Ayuda a tu detergente
Una buena idea para ahorrar detergente y no contaminar tanto en mezclándolo con productos como vinagre, bicarbonato de sodio o bórax. Estos productos fortalecen el efecto del detergente al ser desinfectantes y blanqueadores, además ayudan a eliminar los malos olores.
5. Prefiere el agua fría
Al lavar la ropa con agua fría gastas menos electricidad, proteges la intensidad de los colores en la diferentes telas y además esta temperatura se lleva mejor con la mayor variedad de materiales y fibras utilizadas en la confección.
6. Confía en el poder del sol
En lugar de utilizar la secadora, que extiende las fibras de los tejidos, quema algunos materiales y gasta mucha energía, prefiere secar tu ropa tendiéndola al sol y así se secará mucho mejor. El sol mantiene los blancos brillantes y es un removedor natural de manchas.
7. Consiente a tu lavadora
Si hechas demasiado detergente en tu lavadora, debes limpiarla de vez en cuando. Para eso pon a funcionar tu máquina sin ropa en su interior y con una taza de vinagre. Esto desinfectará y podrá deshacerse de las masas de detergente acumuladas en los rincones.
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