Cuando Norma Cook tenía 85 años un ángel se cruzó en su vida.
Norma vivía sola junto a su gato y cerca de su casa llegó un vecino joven con quien pudo hablar, desahogarse y sentirse importante.
El joven llamado Chris es un actor estadounidense que el 2013 se mudó junto a la casa de Norma. Ellos desde el primer momento se llevaron bien.
Norma Y Chris se hicieron amigos y se ayudaban cada vez que podían. Ambos hacían frente a la soledad juntos.
El momento crítico de Norma
Chris siempre estaba al tanto de la salud de Norma ya que ella no tenía a nadie que la cuidara.
Un día el joven fue a buscarla y se enteró de que Norma había sufrido una crisis en su salud y que estaba hospitalizada.
Chris encontró la forma de ponerse en contacto con Norma y supo que no la darían de alta hasta que los médicos estuvieran seguros de que alguien viviría con ella, debido a que era indispensable que alguien vigilara su salud de forma frecuente.
El joven intentó buscar por internet una red de apoyo, pero no encontró nada y se dio cuenta de que nadie cuidaría mejor de Norma que él mismo.
La decisión de Chris
Chris invitó a su vecina a vivir con él para poder cuidarla. Así Norma pudo salir del hospital y en casa de su joven vecino se sintió a gusto. Ambos terminaron de conocerse y Norma trataba a Chris como si fuera su propio nieto.
Por desgracia la salud de norma empeoró el año 2017 y ella falleció, pero Chris se quedó tranquilo ya que fue feliz en su casa hasta su último día de vida.
Norma se fue de este mundo, pero el lazo creado con Chris perdurará en el tiempo porque fue alguien que supo valorar su compañía y cuidar de ella sin pedir nada a cambio.
Reflexión final
A raíz de esta historia vemos claramente como una fuerte amistad puede terminar convirtiéndose en familia que protege, cuida y respeta.
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