En Indiana, Estados Unidos, más precisamente en el aeropuerto de Indianápolis ocurrió el hecho en el que un perro se recostó sobre la espalda del soldado para cuidarlo mientras este tomaba una siesta.
Un grupo de soldados descansaba junto a sus perros en el aeropuerto de Indianápolis mientras esperaban un vuelo.
Uno de los uniformados quiso recostarse para tomar una siesta en el suelo del lugar y fue ahí cuando su perro mostró ser un gran guardián. El soldado se recostó boca abajo y su pastor alemán se acostó en su espalda vigilando que nadie se acercara al hombre.
Aunque el aeropuerto es un lugar seguro, este perro estaba entrenado para salvaguardar a su humano en todo momento.
Los demás soldados, y otras personas que se encontraban en el aeropuerto, no dudaron en tomar fotografías del momento que habría ocurrido el año 2014, según informó WPTV News.
Si bien desde eso han pasado varios años, este no deja de ser un gran episodio que demuestra la lealtad y preocupación de los canes cuando forjan una amistad con sus humanos.
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