Este es un gran ejemplo de que no necesitamos grandes implementaciones para poder practicar lo que amamos.
Anthony es un bailarín oriundo de Nigeria y con su video bailando bajo la lluvia, descalzo y con precarias condiciones, nos deja claro que no necesitamos música ni una gran escenario para demostrar el increíble talento que llevamos dentro.
Él representa la realidad que muchos niños viven diariamente, sobre todo quienes aspiran a ir más allá y cumplir sus sueños, independiente cuál sea.
“Detrás de esos disfraces de belleza hay muchísimo trabajo duro, detrás del escenario. Con muy pocos recursos o derechamente sin recursos, nuestros hijos están entrenando para ser lo mejor que pueden. Esto no es para derribar a nadie, sino para mostrar su alto nivel de dedicación y compromiso con nuestro programa. ¿Quién no estaría orgulloso de ellos? ¿Qué maestro no rezaría por los estudiantes que se muestran / vienen a clase con tantas ganas de aprender? Niños listos para bailar con o sin condiciones. ¿Imagina qué más podríamos lograr si tenemos más?“
El joven es alumno de la academia Leap of Dance de Nigeria, quienes publicaron su video para mostrar lo que hay “detrás de la escena”. La audiencia solo ve el espectáculo final, pero detrás están los años de esfuerzo, trabajo, compromiso y dedicación. Muchas veces los recursos son inexistentes, solo abunda la pasión y el talento.
La publicación ha recibido miles de comentarios y reproducciones, las personas han sabido reconocer el talento de Anthony, pero de todas formas lamentan su falta de recursos para entrenar.
La repercusión del video ha sido tal, que muchos reconocidos bailarines del mundo lo han felicitado y tomado como ejemplo para inspirar a otros jóvenes.
Publicidad
