Casi la totalidad de la población mundial está en cuarentena durante estos días y quizás aquellos que gozamos de una buena salud, con un sistema inmunológico fuerte, creemos que esta situación de encierro no es razonable. Pero es momento de ser solidario y no pensar solo en nosotros mismos, sino que también en los que podrían caer fácilmente en un estado de salud crítico al contraer el coronavirus.
Este virus se transmite con mucha facilidad, por lo tanto si nosotros lo portamos, muy probablemente terminemos contagiando a otra persona que quizás sí sufra mucho más que un leve resfrío.
La cuarentena será larga y hasta el momento es totalmente indefinida para muchos países, por lo que seguirás experimentando soledad, rabia, pena o incluso aburrimiento. Al reconocer estos sentimientos nos damos cuenta de que nunca más nos gustaría volver a experimentar esta sensación de inseguridad en nuestro propio hogar.
Pero, ¿qué pasa con aquellos seres vivos que viven constantemente con esta sensación en sus vidas? Los animales en los zoológicos están en una situación similar todos los días, no saben o quizás no quieren recordar cómo es estar al otro lado de las rejas disfrutando realmente la vida.
Tener a alguien encerrado en contra de su voluntad no tiene nada positivo.
Afortunadamente esto es temporal para nosotros, pero para los animales que viven en cautiverio es una rutina, su vida, su realidad. Esto nos ayuda a reflexionar si realmente es necesario forzar a las especies para nuestro “entretenimiento”.
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