Ellos son Curtis y Roberta Griner, una pareja que se dedicaba a rescatar perros aunque, esta vez, decidieron darle un giro a su vida.
Supieron que debían hacer algo más y decidieron adoptar a tres hermana polacas llamadas jessica, Victoria y Verónica.
Cuando por fin llegaron a su verdadero hogar, cada niña decidió hacerse cargo de uno de los perros que tenía sus nuevos papás.
Tantos las niñas como los perros han vivido experiencias de vida similares donde todo era abandono, pena, soledad y las ganas de tener un hogar donde fueran amados.
Roberta siempre anhelo tener hijos pronto y se lo comentó a Curtis. Pero en vez de tener hijos propios, ¿por qué no adoptar? El proceso de adopción fue complicado por el idioma y la distancia geográfica, y tuvieron que viajar a Europa para buscar a las niñas. En el intertanto, sus mascotas quedaban en casa al cuidado de amigos.
Pero lo llamativo de la historia es que querían un sólo hijo. Pero al conocer a las tres hermanas huérfanas, su idea cambió radicalmente y decidieron escogerlas a las tres.
Todos las esperaban con ansiedad en casa, incluso las mascotas de la pareja quienes fueron disfrazados con tutús para gustarles a las niñas.
Las niñas se han adoptado muy bien a su nuevo país y hogar. Ya se reconocen como parte de una familia y se ve claramente en sus dibujos.
Este tipo de historias nos dan mucha paz y tranquilidad de ver que siempre habrá gente dispuesta a ayudar a otros con todo el amor del mundo.
Comparte inspiración este día.
Publicidad