Actualmente los perros se han convertido en algo más que nuestro mejores amigos, de hecho su adiestramiento se ha utilizado para ayudar en muchas enfermedades, incluso en la detección de niveles de azúcar en la sangre.
Jedi, es un labrador adiestrado para eso y recientemente le ha salvado la vida a Luke, un niño de 7 años que padece diabetes tipo 1, una enfermedad autoinmune que afecta a cientos de millones de personas en el mundo.
Mientras el pequeño dormía con sus padres, el can notó que la máquina que controlaba los niveles de azúcar en la sangre del niño no emitía ningún sonido. El perro se alarmó y alertó a la madre saltando encima de la cama y haciendo un gesto que le enseñaron en su entrenamiento para indicar que algo anormal estaba sucediendo.
La madre de Luke, escuchó al animal y al tomar una muestra de la sangre de su hijo notó que el nivel de azúcar era mucho más bajo que el que marcaba la máquina, estaba en 57 cuando lo normal está entre 75 y 150, además descendía rápidamente.
Desde que el páncreas de Luke dejó de producir insulina, compuesto necesario para que el cuerpo provea de energía a la sangre, la glucosa en su sangre puede bajar o subir en cualquier momento, sobre todo cuando el pequeño duerme.
Dorrie, la madre de Luke compartió esta historia a través de Facebook y dio a conocer su propia experiencia con un perro adiestrado, el cual le salvó la vida a su hijo, ya que cuando ella despertó, el monitor de glucosa de Luke estaba en apariencia normal, pero fue Jedi quien no dejó de alarmarla porque sabía que algo estaba mal.
Luke tiene un sistema de monitoreo continuo de glucosa insertado bajo su piel para hacer un seguimiento de sus niveles de azúcar en la sangre, pero este dispositivo no arrojó ninguna falla o alerta.
Jedi, el héroe de la familia
Jedi forma parte de un programa emergente de animales específico de perros alerta para diabéticos en donde son adiestrados para detectar un nivel alto o bajo de azúcar en la sangre y alertar a los humanos a través de señales.
A través de su gran sentido del olfato son capaces de detectar difíciles olores emitidos por personas que carecen de insulina, por lo que son capaces de oler los cambios en los niveles de azúcar y compararlos con los de sus dueños.
Los Labradores o Golden Retrievers son las principales razas que se utilizan en estos programas debido a su gran sentido del olfato muy preciso. De hecho, en África se usan algunas razas para detectar tuberculosis y otras enfermedades solo utilizando el olfato.
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