La familia Lamiaceae tiene a la planta Menta o Mentha en sus filas y aunque no lo creas, abarca al rededor de 13 a 18 clases de menta en total. La menta tiene un perfume y gusto excepcional que muchos encuentran refrescante y atrayente.
Debido a esas notas refrescantes, la menta se usa en muchos géneros cosméticos, incluidos productos bucales, untos, pasta de dientes, baños de efervescencias, etc. Cultivar menta en tu huerto debería ser casi obligatorio, sobre todo por sus variados usos y provechos para la salud.
Razones para comenzar a cultivar menta en tu jardín
La menta también se usa en el mundo culinario y le da a cada comida, ya sea dulce o salado, un sabor específico. Pero este no es el final. La menta es increíble cuando se trata de proporcionar beneficios para la salud, también.
Promueve la digestión
Con todos los problemas digestivos que aquejan a la mayoría de la población, ésta ya es es razón suficiente para cultivar menta en tu jardín, ya que tener a la mano un remedio natural para aliviar una digestión en problemas, es muy necesario hoy en día. La menta puede ayudar a lidiar con la indigestión.
La menta está llena de antioxidantes y fitonutrientes que calman el estómago. Además, el olor de la menta activa las glándulas salivales y facilita el proceso de digestión de los alimentos mediante la producción de enzimas digestivas. Estas enzimas relajan los músculos del estómago y previenen espasmos.
Como afirma el Centro Médico de la Universidad de Maryland, el mentol y el salicilato de metilo que se encuentran en la menta alivian el estómago y permiten una digestión normal de los alimentos. Te recomendamos beber una taza de té de menta después de cada comida para mejorar el trabajo de tu tracto gastrointestinal.
Alivia dolores de cabeza y náuseas
Los dolores de cabeza pueden solucionarse fácilmente consumiendo menta regularmente. Debido a su fuerte olor y sabor, la mente también funciona increíblemente desde el exterior. Es así como puedes frotar algunas hojas en tu nariz y dejar que cure tu dolor de cabeza en muy poco tiempo.
Ayuda a la memoria
Tal como lo han demostrado un sin número de investigaciones científicas, la menta funciona muy bien con la aromaterapia y puede ayudar en el proceso de pensamiento y memorización. La menta puede ayudarte a solucionar el problema de olvido, así que prepárate un té de menta y bébelo regularmente. Además, puedes dejar la menta para aromatizar tu casa para sentirte más lleno de energía.
Soluciona problemas respiratorios y tos
Debido a su intenso aroma, la menta puede aliviar significativamente el proceso de respiración y puede tratar cualquier tipo de resfriado o tos. Puedes encontrar una crema de menta y frotarla en tu pecho o puedes hacer lo mismo con hojas de menta fresca también. Recomendamos inhalar vapor de té de menta o tomar té de menta todos los días.
Ayuda a perder peso
Gracias a su producción de enzimas digestivas y ayudar con el procesamiento de alimentos, también puede promover la pérdida de peso. Asegúrate de incluir menta en tu dieta y convertir el almacenamiento de grasa en energía.
Estimula el sistema inmune
Muchos nutrientes beneficiosos se encuentran en las hojas de menta, como fósforo, calcio, vitaminas C, D, E y pequeñas cantidades de complejo de vitamina B. Todo esto puede estimular la inmunidad y hacerte resistente contra infecciones y resfriados.
Alivia el asma
Como las hojas de menta se recomiendan para tratar muchas enfermedades respiratorias, también pueden curar el asma. La menta es rica en ácido rosmarínico, que ofrece fuertes beneficios antioxidantes, y esto previene los leucotrienos desencadenantes de alergias.
Mejora el estado de ánimo
Con solo oler las hojas de menta, ya le estás haciendo un gran favor a tu organismo, debes sentirte con energía y te refrescas al instante. Las hojas de menta también pueden reducir el estrés y la ansiedad, ya que ayuda al cuerpo a liberar más serotonina. Si estás de mal humor, confía en las hojas de menta para resolverlo. Incluso puedes tomar un baño de burbujas de menta y sentir tu cuerpo relajarse gracias al aroma.
Mejora la salud oral
Las hojas de menta, como se mencionó anteriormente, son ricas en compuestos antibacterianos y antiinflamatorios. Como resultado, estos pueden evitar que las bacterias de cualquier tipo penetren en el organismo, especialmente a través de la cavidad oral. Puedes comenzar frotando hojas de menta en tus dientes y encías, y deja que actúe durante varios minutos.
Procedimiento para cultivar la menta
Esta tarea no es compleja en lo absoluto y es una planta muy simple de cultivar. Tiene un sistema de raíces específico, llamado corredores, ya que crece hojas nuevas y puede plantar a lo largo de sus raíces a medida que crecen.
Para crecer la menta, asegúrate de plantar las hojas de menta en macetas separadas, ya que tienden a sobrepasar mucho espacio una vez que comienzan a crecer. Se puede utilizar semillas de menta o simplemente replantar una hoja existente. La segunda opción funciona mejor y más rápido.
Se debe tomar un recipiente que retenga agua y que tenga entre 30 y 40 cms. de ancho (12 y 16 pulgadas), tierra para macetas y la planta de menta. Debemos asegurarnos de que la menta reciba mucha luz solar y nunca dejar de hacerlo para que no se seque. Se debe recortar la planta de menta a 15 cms de altura, así, creará arbustos y no se extenderá en otra dirección. No olvides recortar los capullos de menta para que la planta permanezca en su lugar.
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