Jessaka Clark (25) y Joshua Clark (29) son una joven pareja que está felizmente casada, son muy unidos y su amor se basa en que comparten los mismos valores e intereses, ambos siempre quisieron tener una gran familia.
Durante la primera cita Joshua le dijo a su futura esposa que quería tener 10 hijos, ella sonrió y supo que él era el hombre con el que quería compartir el resto de su vida.
Primero tuvieron a Noah, un regalo para ambos, pero ellos no quisieron parar ahí. Comenzaron a hacer los trámites para poder adoptar a un niño huérfano, porque los dos querían hacer alguna contribución social y al mismo tiempo formar la gran familia que tanto querían.
Pero la adopción resultó un poco diferente a como lo planearon. Generalmente en los orfanatos no se encuentran a hermanos de sangre y menos aún que los adopte la misma familia, ya que no se sienten en posición para criar a varios hijos adoptados a la vez. Pero lo que ellos encontraron fue a 7 hermanos huérfanos en el mismo lugar.
El el orfanato les decían “los super 7” ya que son siete hermanos entre los 5 y 14 años de edad. No fueron separados al ser dados en adopción y se quedaron todos juntos en el mismo orfanato. Lamentablemente sus padres no podían proveerles todo lo necesario para sobrevivir y la institución los acogió.
Joshua vio la foto de estos siete chicos y le dijo a su esposa “¿Y qué opinas de siete?”, Jessaka pensó que su esposo se refería a un nió de 7 años y ella respondió que no tendría problemas en adoptar a un niño de esa edad. Entonces la respuesta de su esposo la impresionó bastante:
“Bueno, un niño de 7 estaría bien, pero no me refería a eso. Me refiero a qué opinas de adoptar a siete niños.”
La pareja lo pensó y conversó durante toda la noche, pero no se podían resistir a esos lindos 7 pares de ojitos, así que no lo dudaron más. Comenzaron a visitarlos y no pudieron impedir sentir que esos hermanos serían sus hijos. Los niños increíblemente comenzaron a decirles “mamá” y “papá”, lo que les dio la determinación para lograr adoptarlos.
Su casa no era muy grande, pero lograron acomodar una pieza para las cuatro niñas y otra para los cuatro niños. Así que en apenas 6 meses lograron obtener los documentos oficiales de adopción.
Cuando la familia por fin estuvo unida, María, la mayor de los 7 hermanos, le contó a sus padres que en realidad ellos eran 8 hermanos. Tenían a otra hermana que fue adoptada por otra familia antes de que ellos llegaran.
Así que los Clark se propusieron demostrarle a las autoridades que era realmente lo mejor para esta octava familia e hicieron todo lo posible por adoptarla también.
Lamentablemente aún no ha sido posible la adopción, ya que las autoridades dicen que la casa es demasiado pequeña para adoptar a una chica más. Pero un amigo de la familia ha organizado una campaña para recoger fondos y lograr que puedan mudarse a una casa más grande. Por el momento la recolecta ha sido todo un éxito y sigue creciendo la suma.
Sin duda la adopción es una gran decisión, pero si los padres están realmente comprometidos no debería haber ningún problema, lo importante siempre será el amor que se tengan entre todos.
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