Este año se cumplen 5 años desde la trágica muerte del famoso actor, Paul Walker, quien falleció en un accidente automovilístico el 30 de noviembre de 2013 en la ciudad de Los Ángeles, California. No obstante, hace poco se han develado espeluznantes detalles sobre ese fatal día.
El abogado Craig McClellan recientemente ha informado que el actor Paul Walker no murió debido al impacto del vehículo, sino al incendio que se generó posteriormente, lo que lo hizo fallecer quiemado en el Porsche Carrera GT rojo en el que iba junto con su amigo Roger Rodas.
Los detalles de la información implican que el actor quedó atascado sin poder moverse entre el tanque de gasolina y el motor del auto. Por lo que no estaba muerto inmediatamente después del choque, como se creía en un inicio.
Es terrible pensar que después del choque, el actor aún estaba vivo, pues sólo tenía las costillas, la clavícula y el brazo roto y, es más, todavía respiraba. Si el auto no se hubiese incendiado, seguiría vivo.
Toda esta información se logró recopilar gracias a que se encontraron rastros de hollín en la tráquea de Walker. Su hija, Meadow Walker, realizó acusaciones hacia la empresa automovilística asegurando que el fuego fue provocado por un defecto de fabricación: “Los inyectores de goma no eran desmontables en caso de accidente para detener el flujo de combustible”, dijo a la agencia de noticias ‘TMZ’.
“Como hemos dicho anteriormente, nos entristece cuando cualquier persona sufre daños en un vehículo Porsche, pero creemos que los informes de las autoridades en este caso establecieron claramente que este trágico accidente se produjo por conducción temeraria y una velocidad excesiva” y pudieron llegar a un acuerdo económico.
Se comenta que este año se estrenará el documental “I Am Paul Walker”, que hará un recorrido por la vida del actor, incluso sus esfuerzos por conservar la vida marina y por la reconstrucción de Haití, luego del fatal terremoto de 2010.
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